La marca del distribuidor continúa bajo presión en Europa, según el informe ‘Private Label in Western Economies’ que ha lanzado IRI. El estudio analiza las tendencias de ventas, precio y promoción de la marca del distribuidor en seis países de Europa (Francia, Alemania, Italia, España, Holanda y Reino Unido), Estados Unidos y Australia.
La cuota de mercado de la marca del distribuidor en el mercado de gran consumo en Europa se situó en el 38,3% de las ventas en valor en 2015, lo que significó una caída de -0,6 puntos respecto al año anterior; en unidades también registró una caída de medio punto, situándose en el 47,4%. Se reafirma así la tendencia descendiente de la marca de distribuidor, en un entorno en el que distribuidores y fabricantes se enfrentan a las difíciles condiciones del mercado, que incluyen la presión de un canal discount que sigue creciendo o la presión promocional que las marcas de fabricante están llevando a cabo.
Aunque se aprecian signos alentadores de crecimiento económico en Europa, que registró un PIB del 1,7% en 2015, a la vez que la tasa de desempleo se reduce o estabiliza, para la marca del distribuidor se pueden encontrar diferentes tendencias según el país analizado, lo que apunta a que las decisiones de los compradores para adquirir marcas de fabricante o marcas de distribuidor difieren en función de las opciones y preferencias locales.
Reino Unido continúa siendo el país con la mayor cuota de marca del distribuidor, que se sitúa en el 51,8%, +0,4 puntos respecto a 2014, siendo también donde más crece de los países analizados. España se sitúa en segundo lugar, con el 41,5% de las ventas en valor de marca de distribuidor, con una caída de -0,4 puntos. Es Francia el país donde más se redujo su cuota (-1 punto), aunque mantiene su fuerte presencia con el 34,1% de las ventas en valor, si se compara con Italia (17,2%) o Australia (13,9%).
El informe también apunta el hecho de que los supermercados están perdiendo ventas de marca de distribuidor en favor del canal discount, que dispone de un surtido más económico de marcas de distribuidor. En Francia, por ejemplo, se registra una caída de las ventas de las marcas de distribuidor de menor precio y de precio estándar. Pero esta tendencia, en cambio, representa una oportunidad para las marcas de distribuidor de gama Premium, cuyas ventas se incrementan.