La cadena de distribución Carrefour aumentará su plantilla este verano en más de 6.000 personas, con el objetivo de reforzar las puntas de trabajo que se producen en el periodo estival.
Un 90% de los contratados se integrarán en las plantillas de los hipermercados y el resto en supermercados y otras filiales de la compañía como agencias de viajes, gasolineras o servicios financieros.
Los candidatos seleccionados han de poseer una clara orientación comercial y de atención al cliente y capacidad para trabajar en equipo. El perfil de las personas contratadas es muy variado, aunque predominan los jóvenes demandantes de primer empleo y estudiantes.
La compañía ha previsto realizar en 2016 más de 4.400 nuevos contratos indefinidos, que se sumarán a los más de 46.000 empleados bajo enseña que el grupo tiene en España.