El aumento de reservas de viaje en Semana Santa, una mayor afluencia de clientes a las tiendas, así como el incremento de contratación de personal temporal y un importante movimiento de mercancías provoca un aumento del riesgo de hurto.
De hecho, en primavera se concentra el 18% de la pérdida desconocida anual, lo que hace que los comercios españoles teman un repunte del hurto esta Semana Santa, según el último Barómetro Mundial del Hurto en la Distribución de Checkpoint Systems,
David Pérez del Pino, director General de Checkpoint Systems en España y Portugal, asegura que “para combatir este riesgo, los minoristas implementan soluciones que previenen el hurto y a la vez impulsan las ventas”.
En función de cada tipo de producto y de establecimiento en las áreas turísticas, la prevención de la pérdida desconocida pasa por la combinación de distintas soluciones como alarmas, etiquetas antihurto, keepers (cajas de policabronato) o spiders que se adaptan a cada envase. Cada vez más los minoristas apuestan, también, por identificar sus productos en origen con etiquetas RFID para controlar la mercancía en toda la cadena de suministro y garantizar que los productos lleguen a las tiendas oportunamente incluso en los momentos de mayor exigencia como Semana Santa.