La Coordinadora de Organizaciones de Agricultores y Ganaderos (COAG) recurrirá ante el Tribunal Supremo el Real Decreto sobre aplicación de pagos directos a los agricultores y ganaderos 2010-2011 si, tal y como recoge el borrador, obliga a los productores lácteos a suscribir un contrato tipo homologado con la industria para recibir el 100% de las ayudas comunitarias.
“Obligar a los ganaderos a firmar contratos tipo con la industria a precios de ruina no creo que sea la manera más adecuada de ayudar al sector a salir de su galopante crisis. El Ministerio pretende más bien resucitar con dinero público un contrato que no acaba de despegar”, ha apuntado Gaspar Anabitarte, responsable del sector lácteo de COAG.
Según la coordinadora, el borrador del Real Decreto establece que el pago adicional se concederá a los agricultores con explotaciones de ganado vacuno de leche, o la agrupación a la que pertenecen, que “tengan suscrito para el año correspondiente a la solicitud única, un contrato tipo de suministro de leche de vaca homologado“. Sin embargo, el artículo 69 del Reglamento comunitario prevé la obligatoriedad por parte de los Estados miembros de la realización de un pago adicional anual a los tipos específicos de actividades agrarias que sean importantes para la protección o la mejora del medio ambiente, calidad y comercialización, entre las que se encuentra el vacuno de leche, sin ningún tipo de mención a condicionamientos de contratos con industrias.
Gracias a esta iniciativa jurídica, COAG ya consiguió el pasado año que los ganaderos pudieran recibir todas las ayudas de la UE sin necesidad de firmar contratos con la industria. Esta organización considera inadmisible que cualquier apoyo al sector lácteo se vincule a la obligatoriedad de suscribir el contrato tipo homologado entre el productor y la industria láctea porque se entiende que ello discriminaría y penalizaría a todas aquellas personas dedicadas a la producción que no quisieran suscribir los contratos, privándoles de la posibilidad de obtener el 100% de las ayudas.
El propio Comité de Seguimiento del acuerdo lácteo ha confirmado que no se han suscrito apenas contratos entre ganaderos e industria y los precios siguen hundidos (entre 0,24 y 0,26 euro/litro cuando los costes están por encima de los 0,31 euros/litro). COAG rechazó en su momento el contrato tipo homologado y no firmó el acuerdo porque no garantizaba de ninguna manera un precio rentable para los ganaderos que como mínimo cubriera los costes de producción.