El comercio electrónico B2C en España experimenta un incremento en 2014, aunque inferior al registrado en los anteriores ejercicios. El volumen total del sector es de 16.259 millones de euros, un 11,3% superior al año 2013.
Este incremento se produce debido a la leve mejoría del contexto socioeconómico. Sin embargo el incremento de facturación estimado para 2014 es inferior a los obtenidos en 2013 respecto al año 2012 (donde se alcanzó una tasa de crecimiento del 18%) e incluso en 2012 respecto de 2011 (13,4%).
El comercio electrónico sigue en expansión, con un crecimiento anual de más de dos cifras, aunque ralentiza el ritmo en este último año, según el Estudio sobre Comercio Electrónico B2C 2014, realizado por el Observatorio Nacional de las Telecomunicaciones y de la Sociedad de la Información (ONTSI), de Red.es.
Este crecimiento se produce por la evolución positiva de las tres variables principales para estimar el volumen del B2C: el número de internautas, la proporción de internautas que realizan compras online y el gasto medio por comprador. A ese incremento total del volumen de negocio contribuye sobre todo el crecimiento del gasto medio por comprador (876 euros, un 11,4% más que en 2013), puesto que el aumento en el resto de los datos arroja una menor cuantía: sólo tres puntos porcentuales de incremento en la penetración de Internet (de 73 a 76%), y menos de dos puntos en la del número de usuarios del comercio electrónico (del 60,6 al 62%).
El crecimiento sostenido de la población internauta total mantiene y acentúa el cambio en el perfil global del usuario de Internet experimentado en los últimos años. Destacan las incorporaciones al uso de Internet de la población de edades maduras (más de 50 años) y una intensificación del uso en los más jóvenes (menos de 35 años).
El perfil de comprador online sigue siendo, como en años anteriores, similar al perfil tradicional de internauta: más intensivo entre los hombres, los grupos de edad de 25 a 49 años, con estudios secundarios o universitarios, de nivel socioeconómico medio y medio alto, trabajadores en activo a tiempo completo y residentes en hábitats urbanos (más de 100.000 habitantes).
El comportamiento de los compradores online presenta síntomas de madurez, pero se observan interesantes variaciones que apuntan hacia cambios de hábitos:
· El hogar es sin duda el lugar preferido para realizar las compras pero se incrementa notablemente la compra en movilidad, que aunque minoritaria alcanza un 10,5%.
· Irregularidad en la frecuencia. El 63,0% de los compradores declara no tener una frecuencia fija para este tipo de operaciones.
· El número medio de categorías compradas por individuo comprador se sitúa en 3,53, por debajo de la cifra de 2013 pero ligeramente por encima de la de 2012 (3,46).
· La búsqueda online se consolida como el principal método de búsqueda de información y de comparación de precios. En esa búsqueda, debe destacarse además el crecimiento del uso de dispositivos móviles, aunque todavía sigue siendo minoritario frente al ordenador convencional.
· Los sitios web que venden exclusiva o principalmente por Internet se consolidan como primer canal de compra (61,4%) seguido de las web del fabricante (46,2%). Los sitios web de bonos o cupones descuento mantienen su tendencia creciente alcanzando el 29,8% de las compras. El motor de crecimiento de este nuevo canal son las mujeres, menores de 50 años, residentes en las poblaciones pequeñas y con relativa independencia de su situación socio-económica.
· La tarjeta de crédito/débito sigue siendo la forma de pago preferida a la hora de hacer la compra (64,1%), mientras los sistemas intermediarios de pago (por ejemplo PayPal, etc.) se consolida como segunda opción de preferencia (25,3%).