Bajo el lema «Más productos en la bolsa, menos bolsas en el mundo», la cadena de hipermercados Alcampo ha puesto en marcha un plan de reducción de bolsas de plástico cuyo objetivo es dejar de consumir más de 50 millones de bolsas, evitando generar 250 kilogramos de plástico y la emisión de 220 toneladas de CO2 a la atmósfera.
Con esta iniciativa, Alcampo pretende concienciar a clientes y empleados de la necesidad de un consumo responsable de bolsas de plástico y de la importancia que tiene el correcto llenado de las mismas para evitar la generación de residuos perjudiciales para el medio ambiente.
El plan de reducción incluye, también, el uso de las bolsas alternativas con las que cuenta el grupo: bolsas verdes de plástico reciclado, capazos de rafia y bolsas biodegradables fabricadas de fécula de patata. De esta forma, el grupo ha rebajado el precio de los capazos de rafia y de las bolsas biodegradables.
Alcampo dentro de su política de Responsabilidad Social mantiene un firme compromiso con el medio ambiente. En 2004, sustituyó las bolsas de caja blancas, por bolsas transparentes, resultado de haber eliminado el titanio, un pigmento blanco utilizado para teñirlas. Así, en el proceso de destrucción, se evita generar dióxido de titanio, elemento perjudicial para el medio ambiente. Además son más resistentes ya que el titanio debilita la consistencia del plástico y al no utilizarlo, se favorece un mayor llenado y por lo tanto, un menor consumo.
Un año más tarde, con la implantación de Cajas Verdes en todos los hipermercados se convirtió en la única empresa de distribución de España que ofrece esta medida de compra sostenible, contando con cajas de salidas donde no se dispensan bolsas de plástico. El cliente puede utilizar sus propias bolsas o adquirir una de las ecológicas que ofrece la cadena.