El índice de precios de los alimentos de la FAO se redujo un 0,9% en junio con respecto al mes de mayo de 2015. Con 165,1 puntos, el índice se ha reducido un 21% respecto a hace un año y está en su nivel más bajo desde septiembre de 2009.
Este descenso se produce principalmente como resultado de una caída del 6,6% en el precio del azúcar y del 4,1% en los precios de los productos lácteos, que compensaron con creces un repunte en los precios del aceite de palma y del trigo. El aumento de la demanda mundial de piensos para el ganado, especialmente en Brasil, China y Estados Unidos, está apoyando los precios de los cereales secundarios, incluido el maíz.
Pero esas tendencias de los precios mundiales y las perspectivas favorables para la producción mundial de cereales ocultan puntos localizados de inseguridad alimentaria, advierte también el informe “Perspectivas de cosechas y situación alimentaria”.
Hay 34 países de todo el mundo, 28 de ellos en áfrica que albergan a grandes números de refugiados, que necesitan de ayuda alimentaria externa.