Las poblaciones de peces del norte y el oeste de Europa se están recuperando, mientras que en el mar Mediterráneo sigue habiendo graves problemas de sobrepesca, ha dicho Maria Damanaki, comisaria europea de Asuntos Marítimos y Pesca.
La comisaria ha presentado el informe de este año sobre el estado de las poblaciones de peces y la preparación de la fijación de las cuotas de pesca del año próximo. Este documento está ahora a disposición de las partes interesadas para que, a través de una consulta pública en línea, manifiesten sus puntos de vista antes de que la Comisión formule durante el otoño sus propuestas sobre las posibilidades de pesca para 2015.
Por primera vez, la Comisión ha podido tener en cuenta los dictámenes científicos sobre el estado de las poblaciones en el Mediterráneo y el mar Negro. Las poblaciones de peces del norte y el oeste de Europa se están recuperando, mientras que en el mar Mediterráneo sigue habiendo graves problemas de sobrepesca.
– Los datos de las poblaciones de peces del Mediterráneo muestran un panorama desalentador: el 96 % o más de las especies bentónicas mediterráneas son objeto de sobrepesca y, para las poblaciones de aguas medias como la sardina y la anchoa, el porcentaje es igual o superior al 71 %. En el caso del mar Negro, todos los peces bentónicos y un 33 % de las poblaciones pelágicas se encuentran sobreexplotados.
– No obstante, en otros lugares, como en la zona del Atlántico nororiental, lo que incluye los mares del Norte y Báltico, las noticias son positivas: la sobrepesca ha disminuido, pasando del 86 % (30 poblaciones objeto de sobrepesca de las 35 evaluadas) en 2009 al 41 % (19 poblaciones de un total de 46) en 2014.
«Me preocupa extraordinariamente la pésima situación del mar Mediterráneo», ha declarado la comisaria europea. «Ahora que los científicos han evaluado muchas más poblaciones de peces a lo largo de los últimos cinco años, es preciso rendirse a la evidencia: el mar Mediterráneo está sufriendo una intensísima sobreexplotación. Nos espera una tarea larga y un difícil camino por recorrer: tenemos que hacernos con los conocimientos científicos necesarios y adoptar planes de pesca regionales para que la pesca disminuya a niveles sostenibles. Si no actuamos ahora, perderemos el enorme potencial de estos recursos para las generaciones futuras. La nueva política pesquera común nos brinda una oportunidad que debemos materializar, y esta será la cuestión que debatiré con todos los Ministros de Pesca de los Estados miembros del Mediterráneo».
Con respecto a la situación en la zona del Atlántico nororiental, la Comisaria Damanaki ha señalado que "La satisfactoria recuperación de las poblaciones de peces del Atlántico nororiental es para mí la prueba de que, con la normativa adecuada, es posible poner fin a la sobrepesca. Cuando se dispone de los conocimientos científicos adecuados, cuando las capturas se establecen al nivel correcto y cuando -lo más importante de todo- los pescadores se suman a los esfuerzos para proteger las poblaciones, no me cabe duda de que la mejoría se va a producir. Estos son los principios en que se basa la política pesquera común reformada".