Los eurodiputados votaron en el pleno de abril a favor de que el consumo de las bolsas se reduzca a la mitad en 2017 y un 80% en 2019 con respecto al nivel de 2010.
Cerca de 200 bolsas por habitante se comercializaron en la Unión Europea en 2010, según los cálculos del servicio de estudios del Parlamento Europeo. Además de reducir el consumo de bolsas de plástico, la propuesta recién aprobada por los eurodiputados también prevé que se cobre por el uso de las mismas en el sector de la alimentación, y una recomendación para que también se cobre en otros sectores.
La propuesta contempla igualmente una posible reducción de precios y tasas para las bolsas biodegradables; y que las bolsas desechables usadas para envolver fruta, verduras o dulces deberán ser sustituidas a partir de 2019 por bolsas de papel reciclado o biodegradable.
Margrete Auken, eurodiputada danesa del grupo de los Verdes y principal responsable de la negociación de la propuesta en el interior del Parlamento Europeo, aseguró tras la votación que "los eurodiputados han votado a favor de reforzar de manera significativa el proyecto de normativa europea para reducir el uso de las bolsas del plástico y los residuos, incluyendo objetivos europeos obligatorios y el requisito de que las bolsas de plástico tengan un coste".