El mercado de aditivos y complementos alimentarios mantuvo en el bienio 2012-2013 la tendencia de moderado crecimiento de años anteriores, a pesar del deterioro de la coyuntura económica. El volumen de negocio en el mercado español se situó en 430 millones de euros en 2013, lo que supuso un incremento del 2,4% respecto al año anterior, porcentaje igual al obtenido en 2012, según DBK.
El lanzamiento de nuevos productos multifuncionales, con mayores prestaciones y más adaptados a las necesidades de los clientes, así como el aumento de la penetración de los aditivos de origen natural en detrimento de los artificiales, continuaron favoreciendo el desarrollo del sector.
Se estima que el mercado español crecerá alrededor del 4-5% tanto en 2014 como en 2015, alcanzando un valor de 470 millones de euros en el último año. Del mismo modo, las ventas en el exterior seguirán incrementándose en los próximos años.
El sector está compuesto por unas 150 empresas con actividad relevante como fabricantes o importadores de aditivos y complementos para la industria alimentaria, que generan un empleo en el sector de alrededor de 1.250 trabajadores.
Destaca la concentración de la actividad en Cataluña, que reúne alrededor del 50% de las empresas. A continuación, si bien a gran distancia, figuran en términos de número de empresas Madrid y la Comunidad Valenciana.
Entre los operadores destaca la presencia mayoritaria de empresas de mediana y pequeña dimensión, junto a las que opera un número más reducido de compañías de gran tamaño. Entre los principales competidores figuran filiales de grupos multinacionales extranjeros especializados en aditivos y complementos alimentarios, así como filiales de grupos químicos.
La actividad exportadora tiene una importancia relevante para las principales empresas del sector. En 2012 la facturación agregada en el extranjero de 12 de las principales empresas especializadas en el sector supuso el 56% de su facturación total.