La compañía cervecera Mahou San Miguel ha cerrado el ejercicio de 2012 con un beneficio de 175 millones, un 7,5% inferior al del año anterior. Sus ventas han alcanzado un valor de 1.173 millones de euros, un 1,9% menor al registrado en el ejercicio previo, según ha informado la empresa en un comunicado.
Este resultado se debe al “contexto económico de menor consumo”, explican fuentes del grupo que produce 12,3 millones de hectólitros y posee una cuota de mercado del 37%.
La cervecera, de capital 100% español, ha realizado un importante esfuerzo inversor en 2012, a pesar de la situación económica en España, la caída del consumo y el incremento de los costes de las materias primas. Así, han destinado 72 millones de euros, fundamentalmente, a impulsar el crecimiento del negocio (17 millones de euros) y a la modernización y mejora industrial de sus centros de producción (26 millones de euros). Asimismo, ha dirigido casi un tercio de su inversión total a apoyar al sector de la hostelería a través de sus instalaciones, equipamiento y múltiples iniciativas para promover el consumo responsable en bares y restaurantes (20 millones de euros).
La seguridad y la prevención de riesgos laborales han sido otros de los ámbitos en los que Mahou San Miguel ha puesto el foco de sus inversiones. En 2012, la compañía ha incorporado 74 nuevos profesionales a sus centros de trabajo en España, hasta superar los 2.530. Además, ha destinado al desarrollo de su equipo humano más de un millón de euros que se han traducido en 48.700 horas de formación.
En 2012, la compañía ha dado un paso muy importante en su estrategia de internacionalización con la adquisición del 50% de la compañía india Arian Breweries & Distilleries Ltd y el lanzamiento, por primera vez en su historia, de un producto desarrollado desde España para un mercado internacional: San Miguel Fresca, que acaba de aterrizar también en nuestro país. Esta marca se ha convertido en la segunda cerveza española más vendida en Reino Unido después de San Miguel.