La empresa galletera Gullón ha cerrado el ejercicio de 2012 con una facturación record de 216,8 millones de euros, lo que supone un incremento del 11,4% con respecto al mismo periodo del año anterior.
Con este resultado se mantiene la “tendencia de las últimas décadas” con crecimientos en ventas a un ritmo de dos dígitos cada año, aseguran fuentes del grupo. Los beneficios después de impuestos son de 16,5 millones de euros, un 10,7% más.
Este notable crecimiento en las ventas se debe, en parte, a la mejora de las exportaciones, que ya representan un 35%, cifra que también mejora respecto al año anterior. “Debido a la crisis económica, la exportación es una vía para crecer, especialmente en aquellos países cuyas economías presentan fuertes tasas de crecimiento”, explican desde la galletera.
Otro de los elementos que han llevado al buen comportamiento de las ventas de la marca Gullón es el liderazgo de la compañía en el sector de galleta salud, en el que ya alcanza una cuota de mercado superior al 30%.
La inversión que el grupo está realizando durante el presente ejercicio asciende a 33 millones de euros, destinados a ampliar líneas de producción de Gullón 2 y a la finalización y puesta en marcha de la nueva fábrica de Gullón, Vida, que ya tiene una línea de producción en marcha y una segunda línea en proceso de instalación que está en fase de prueba. Esta fábrica, que ha contado con un presupuesto total de 48 millones de euros, diversificará el catálogo mediante nuevos productos distintos de galletas dirigidos a los mercados internacionales.
Tras un 2012 con buenos resultados en un entorno económico complicado, el grupo aspira en 2013 a mantener el ritmo de crecimiento de los últimos años. Se espera un nuevo incremento en el peso de las exportaciones, un porcentaje que la compañía confía en llevar hasta el 40% en el próximo año. Por el momento, los primeros datos del primer trimestre del año demuestran que Gullón está en la senda para alcanzar estos objetivos.