El Grupo Calvo celebra estos días los diez años de presencia en El Salvador, en lo que supone la consolidación de su proceso de expansión internacional que inició en 1993 con la incorporación de la marca Nostromo en Italia y que continuó en 2004 con la entrada en el importante mercado brasileño con la compra de la compañía Gomes da Costa.
En El Salvador, Grupo Calvo se ha convertido en uno de los máximos responsables del reciente impulso económico del país y, más concretamente, del departamento de La Unión, donde se encuentra una de sus plantas y donde ha generado la mayoría de los 1.700 empleos directos y los 5.000 indirectos que ha creado en el país, la mayor parte mujeres.
Desde que iniciara las operaciones en 2003, Grupo Calvo ha invertido en El Salvador más de 100 millones de Euros para tener una de las plantas de procesamiento más modernas del continente capaz de procesar 40 mil toneladas de pescado y producir más de 100 variedades de alimentos que se exportan a 22 países de Europa, Asia, América y áfrica.
Durante estos 10 años, Grupo Calvo ha realizado también una importante labor social en la comunidad salvadoreña a través de diversas iniciativas para mejorar las condiciones de vida de la población, especialmente el futuro de miles de niños, y la integración de colectivos desfavorecidos.
Los alimentos del Grupo Calvo y sus principales marcas, Calvo, Nostromo y Gomes da Costa, están presentes en más de 70 países. La compañía tiene plantas de producción en España, El Salvador y Brasil, y emplea a más de 4.500 personas en todo el mundo. En 2012 el Grupo facturó 641 millones de euros.
Aunque las conservas y los productos del mar siguen representando una gran parte de su oferta, la compañía ha hecho una firme apuesta por la innovación y la diversificación y ha extendido su conocimiento y experiencia en la elaboración de productos naturales y saludables de calidad a otro tipo de alimentos como conservas vegetales, ensaladas y platos preparados, entre otros.