“Cualquier bodega se encuentra en el centro del mundo del negocio del vino español si está en FENAVIN”, ha dicho el presidente de la Feria Nacional del Vino y de la Diputación provincial de Ciudad Real, Nemesio de Lara.
Para De Lara la feria “podría comenzar su actividad mañana, no sólo porque organizativamente esté todo dispuesto, sino porque las bodegas ya han completado nuestro espacio”.
De este modo, De Lara, junto al coordinador institucional de la Feria, José Fernando Sánchez Bódalo, y el director de la misma, Manuel Juliá, ha considerado como un acicate la propia coyuntura económica desfavorable, por lo que la organización ha planteado la séptima edición de la Feria Nacional del Vino como la más ambiciosa de su historia en generación de negocio, con dos objetivos claros: impulsar al máximo las posibilidades para que oferta y demanda puedan encontrarse, y analizar y proponer nuevas vías para prestigiar el consumo de vino, en un momento en el que la propia situación económica y el escaso consumo de los españoles hablan del mal momento que atraviesa el sector.
Como ha detallado a los periodistas, está previsto lograr que este año trabaje en la Feria el mayor número de compradores nacionales e internacionales por bodega de la historia de FENAVIN, de forma que la ratio permita un aprovechamiento máximo de las horas de trabajo de las tres jornadas de Feria, un ratio que, como ha asegurado el presidente de la Feria, “no se da en ninguna otra feria de vino del mundo”.
El objetivo es accesible puesto que, en esta edición, 1.214 bodegas tendrán sus vinos en FENAVIN, un 1.4% más que en la edición anterior. Además, habrá presencia de vinos de todas las denominaciones de origen del país, lo que demuestra que el sector se ha volcado, una vez más, con la Feria.
Hasta la fecha, forman parte de la lista de reserva un total de 232 bodegas de todo el territorio español por falta de espacio.
En este escenario favorable al negocio, el número de compradores nacionales e internacionales está previsto que alcance casi los 12.800, un 4,83% más que en la edición anterior, teniendo en cuenta el número de preacreditaciones realizadas hasta el momento y que la organización gestionará 700 compradores llegados de 61 países del mundo, y casi 3.000 nacionales, a través del Programa Contacte Con…, más todos aquellos que lleguen a la Feria por su cuenta.
Como ha explicado De Lara, las previsiones con las que trabaja la organización hablan de que será posible cerrar alrededor de 6.000 citas previas entre compradores nacionales e internacionales y bodegueros.
El segundo objetivo de esta séptima edición de la Feria, prestigiar el consumo del vino, recibirá un fuerte empujón con la presencia del mayor número de figuras relevantes del mundo de la Cultura, la Moda, el Deporte y la Gastronomía de todas las ediciones celebradas, en las 61 actividades programadas con 170 ponentes, previstos, como explicó el presidente ferial. La idea es prestigiar el consumo de vino, reavivando sus conexiones históricas con valores culturales, saludables, estéticos y deportivos.
De este modo, la organización está preparando una Programación de Actividades que incluyen, además de jornadas y conferencias formativas sobre cómo exportar mejor a distintos países o acerca de las últimas tendencias en marketing y nuevas tecnologías para optimizar la venta de vino, distintos espacios en los que importantes personajes del mundo de la literatura, el cine, la moda; del deporte, de la salud y de los medios de comunicación transmitan su pasión por la cultura del vino y el valor añadido que su consumo moderado puede aportar a la vida de los españoles.
Nombres muy destacados del mundo del vino internacional compartirán sus conocimientos en distintas actividades esos días. éste es el caso de Robert Joseph, considerado una de las 50 personalidades más influyentes del mundo del vino internacional, fundador del International Wine Challenge y editor jefe de la publicación Wine Business Internacional, quien intentará arrojar luz sobre las claves para conocer los gustos de los consumidores en distintos países; Pedro Ballesteros, Master of Wine español, María José Huertas, Nariz de Oro y sumiller de la Terraza del Casino de Madrid y David Seijas, sumiller de El Bulli hasta su cierre y Nariz de Oro 2006.