Un 55% de los consumidores se podrán permitir mantener su consumo navideño y gastará entre 600 y 700 euros por familia de forma “moderada, racional e inteligente” mientras que otro 25% no podrá, y ajustará sus gastos navideños a unos 300 euros, según el Observatorio de Consumo de ESADE.
Predominarán los regalos más prácticos y duraderos: los aparatos electrónicos (tablets o móviles) serán el regalo estrella este año. La mitad de las familias no se gastará más de 50 euros en juguetes por niño y muchos optarán por juguetes de bazar.
La compra a través de un dispositivo móvil pasará del 11% al 20% estas navidades. Se consolidan los portales de compra colectiva y los outlets on-line: el 13% del presupuesto de las familias en regalos se materializará vía Internet.
Según se desprende del estudio de ESADE, durante estas fechas se impone el Smart shopper o comprador “inteligente”. Un perfil que exige calidad, pero es menos dado a la compra por impulso. Ante una situación ya “normalizada”, este consumidor mantendrá un presupuesto medio entre 600 y 700 euros por familia, cuando venía de un gasto de 1.000 euros en 2007. Esta cifra ha supuesto una reducción del 38%, especialmente en regalos, alimentación extra y ocio extraordinario para estos días.
En el polo opuesto, se encuentran los hogares con un único ingreso. En este caso, lo celebrarán en casa de manera convencional con un gasto medio de 300 euros por familia. Un presupuesto que destinarán principalmente a partidas clave como la alimentación y los niños, aunque de manera sesgada.
En cualquier caso, las compras navideñas vendrán marcadas por la búsqueda y la comparación de precios. Y es que para la mayoría de las familias, la Navidad es consumo como en el resto del año. Y por tanto, eliminarán el lujo, la compra ostentosa y el ocio. En cambio, predominarán los regalos de uso más práctico y duradero: los aparatos electrónicos (tablets o móviles) serán el regalo estrella este año.
También se dejará hueco para pequeñas gratificaciones que se han estado aplazando durante el año (como reponer algún electrodoméstico para el hogar). Y se recuperarán tradiciones como las comidas familiares, aunque más austeras (precocinados o congelados de supermercado).
Del mismo modo, y a pesar de que los padres seguirán haciendo lo posible para que sus hijos no noten la crisis, el presupuesto para ellos seguirá intacto. En la mitad de las familias españolas, el gasto en juguetes no superará los 50 euros por niño. Sin embargo, los hogares que padecen más la crisis eliminarán las listas de juguetería, no se dejarán influir por anuncios de televisión y se decantarán por juguetes de bazar.
Por otro lado, se reduce el número de regalos de empresa, la cantidad de obsequios a familiares lejanos y el “amigo invisible”. A cambio, primará el pragmatismo y la comodidad del regalo pactado o con tique de compra.
Un año más Internet será el gran aliado de las compras navideñas. Según se desprende del estudio, se estima que el volumen de negocio a través de Internet en Navidad será de 1.500 millones de euros y el 13% del presupuesto de las familias en regalos se materializará vía on line.
Los smartphones se llevarán buena parte del protagonismo. En este sentido, no sólo se consolida el uso del móvil como canal de obtención de información (compra social), sino que actualmente el 11% de la población ya compra a través de un dispositivo móvil. El estudio apunta que esta cifra podría crecer hasta un 20% en periodo navideño, siendo transportes, seguros y compra de entradas los productos con mayor potencial de adquisición. En una segunda categoría quedarían películas, música y libros electrónicos.
El informe confirma que se consolidan los portales de compra colectiva y los outlets on-line como espacios para desarrollar la actividad de compra por Internet. En este sentido, el consumidor buscará regalos económicos, basados en promociones y descuentos.
Así, se prevé un consumidor más social. Aprovechando la comodidad que ofrece la red, buscará ofertas, comprará precios y usará las redes sociales como punto de encuentro con otros usuarios para obtener consejo antes de lanzarse a comprar. El informe confirma que el 70% de los consumidores se informan por internet antes de efectuar la compra en el establecimiento.
En este sentido, alerta de que la demanda interna seguirá siendo negativa. Y lo achaca a factores como la disminución de la renta, el cambio en los patrones de consumo, las consecuencias del gasto público o la elevada tasa de paro. Ante este escenario, el consumidor seguirá sin recuperar la confianza y se mostrará “escéptico” ante una posible recuperación económica.