El Consejo Regulador de la D.O.P. Cariñena estima que la cosecha recién iniciada alcanzará un nivel similar al del pasado año: unos 71 millones de kilos de uva, de calidad muy buena. La previsión de ventas para este año se sitúa en torno a unos 65 millones de botellas.
Con la Fiesta de la Vendimia arranca la recogida de la uva en la Denominación. Desde el pasado día 20 se están vendimiando ya las variedades Chardonnay y Merlot, pero el grueso se empezará a recoger a comienzos de septiembre y previsiblemente durará hasta mediados o finales del mes de octubre.
El presidente de la DOP, José Luis Mainar, ha felicitado a todos los integrantes de la Denominación y ha destacado que el valor de las cifras “es más grande con las enormes dificultades que nos plantea la situación actual”. También felicitó a los trabajadores de la Denominación por el incremento de las ventas en el último ejercicio, “cuyo valor es más grande si pensamos en las enormes dificultades que nos plantea la situación actual”.
Sin embargo, el hecho de aumentar las ventas no significa que los beneficios hayan crecido en la misma proporción ya que se concentran en los vinos jóvenes, los de menor coste. “Sabemos que los consumidores han dejado los crianzas, reservas y grandes reservas para ocasiones muy contadas”, ha indicado. La mayoría de las Denominaciones atraviesa un periodo de caída general. Por ello, ha destacado el presidente, “tenemos que sentirnos privilegiados y felicitar a todos los responsables que hacen posible nuestra situación actual”. De igual forma, ha resaltado que gracias a que la mitad de los viñedos se riegan por goteo, se ha asegurado el mantenimiento de la producción, que incluso podría registrar un aumento, frente a la tendencia del resto de denominaciones.
Mainar recalcó la apuesta de Cariñena por las rutas gastronómicas unidas al turismo como la Ruta del Vino de las Piedras: “hemos destinado una importante partida de los presupuestos a este proyecto que no se puede arrinconar desde ninguna Denominación de Origen con vocación de liderazgo y menos aún cuando se tiene la historia, el presente y el futuro que tiene nuestra denominación”.
Por su parte, el consejero de Agricultura, Ganadería y Medio Ambiente del Gobierno de Aragón, Modesto Lobón ha mostrado a la Denominación el compromiso del Ejecutivo para contribuir a que “esta fiesta sea cada vez más grande”. De la misma manera, el consejero ha destacado que el vino es uno de los mayores embajadores de Aragón y “queremos que esa embajada sea permanente para que a pesar de los malos momentos se sigan consiguiendo beneficios”. En ese afán de superación ha recordado la importancia de la Estrategia de la Agroindustria porque “es el futuro de Aragón y el vino tiene en ella un sitio especial”.