Durante el Congreso de la CIBE celebrado en Francia, el presidente del Copa, Gerd Sonnleitner, ha abogado a favor del mantenimiento de las cuotas del azúcar por lo menos hasta 2020, argumentando que ya ha habido una importante reestructuración del sector, sin precedentes, con la reforma de 2006.
Deben mantenerse las cuotas, porque la industria necesita una organización de mercado estable para poder mejorar su competitividad, ha añadido.
Hablando en Reims en representación del Copa-Cogeca, Sonnleitner ha insistido en que “recientemente, los productores tuvieron que afrontar ya recortes muy dolorosos con la reforma de 2006. En la UE, 140.000 productores de remolacha han tenido que abandonar la producción de remolacha y se han perdido 10.000 puestos de trabajo. Los agricultores que han seguido cultivando la remolacha han tenido que afrontar una reducción significativa del precio mínimo de la remolacha, así como del precio de referencia del azúcar blanca. Las cuotas nacionales se han reducido al 85% de la demanda interna de la UE, transformándose así la UE, de exportador neto en importador neto”.
«Para mejorar la eficiencia del sector -añadió-, debe seguir progresándose en el campo de la obtención vegetal, porque así podrían conseguirse 20 toneladas más de azúcar por hectárea en las mejores regiones de producción remolachera. También debemos mantener la competitividad del sector, en comparación con otros cultivos herbáceos. De cara al futuro, el sector del azúcar necesitará una organización de mercado común estable para poder seguir mejorando su competitividad. Es de una importancia vital mantener la actual organización común de mercado, por lo menos hasta 2020. Nuestro objetivo común debe ser preservar y defender una producción remolachera competitiva junto con una potente industria azucarera. Por consiguiente, me opongo a la desaparición progresiva de las cuotas del azúcar de aquí a 2015”, añadió.