El sector de alimentación sigue siendo uno de los que más ofertas de empleo cualificado genera cada año, en concreto, el 5,3% del total, lo que lo sitúa como el quinto sector creador de empleo en nuestro país, según un análisis realizado por Adecco e Infoempleo.
Dicho estudio ha analizado la distribución sectorial de la oferta de empleo en nuestro país. Para ello, se han incluido en este estudio más de sesenta sectores que, teniendo en cuenta el tipo de actividad primaria que desarrollan, han sido agrupados en cuatro grandes macrosectores: servicios, industrial (en el que se incluye Alimentación y Bebidas), infocomunicaciones y construcción.
En cambio, a pesar del buen dato, en 2011 el sector ha retrocedido en cuota de ofertas con respecto a 2010 cuando era el segundo generador de empleo y aglutinaba el 5,63% de ellas (descenso de 0,33 puntos porcentuales).
El ritmo de destrucción de empleo en nuestro país ha sido mayor que el de creación del mismo en los últimos años, debido a la crisis económica y, por tanto, laboral, que azota nuestro país y nuestro entorno macroeconómico. A pesar de ello, algunos sectores han seguido creando puestos de trabajo y reclamando nueva mano de obra para hacer frente al futuro que se presenta. Estudiar esos sectores se hace fundamental en estos difíciles momentos para analizar cuáles son nuestros puntos fuertes y reforzarlos, y así poder enfrentar los próximos meses desde una perspectiva de conocimiento y dominio de la situación.
El macrosector industrial, que concentra el 40,66% de la oferta total de empleo en España en 2011, es uno de los que mejor comportamiento ha registrado este último año.
A pesar de ocupar de nuevo la segunda posición del ranking de distribución macrosectorial del empleo, industrial se acerca cada vez más a los valores conseguidos por el área de servicios que, aglutinando el 41,82% del conjunto de ofertas, se mantiene como el principal macrosector en generación de empleo en nuestro país. Sin embargo, a pesar de liderar el ranking, servicios pierde cuatro puntos y medio con respecto a 2010 y confirma la tendencia negativa de los últimos años en el sector.