Asociafruit y Asociaflor denuncian que la Comunidad Valenciana ha abierto una “guerra” entre comunidades autónomas por el uso de las nuevas variedades vegetales obtenidas por centros oficiales.
Según estas asociaciones, “si se aplicara un modelo igual para el resto de los cultivos se iniciaría una “guerra” varietal autonómica en la que cada comunidad autónoma haría uso de sus avances frente a las demás; por ejemplo, Andalucía en el olivar, Cataluña o Aragón con la fruta de hueso, y un largo etcétera, trayendo más problemas que beneficios para el sector agroalimentario nacional.
“Aunque su ubicación y origen son valencianos, el Instituto Valenciano de Investigaciones Agrarias (IVIA) recibe recursos humanos, técnicos y económicos a cargo del presupuesto del Estado, debiendo permitir la explotación de sus innovaciones a todo el sector nacional. Andalucía no podrá cultivar las nuevas variedades de cítricos del IVIA, lo que supondrá una pérdida muy significativa de competitividad y una peor posición competitiva frente a otras zonas de producción”, denuncian tales asociaciones.
Según ellas, no sólo el sector citrícola andaluz se ve perjudicado por esta decisión política, también el sector de los viveristas, englobados en Asociaflor, al impedirles su producción. Otras regiones como Cataluña y Murcia también sufren el bloqueo a la innovación puesto en marcha por la Generalitat Valenciana.
Las asociaciones denunciantes indican que ell pasado 12 de abril, la Fundación Agroalimed, fundación que utiliza el Instituto Valenciano de Investigaciones Agrarias (IVIA) para la explotación de sus obtenciones, colgó en su página web la nueva fórmula que va a utilizar la Generalitat Valenciana para que solo los agricultores valencianos puedan tener acceso a estas variedades, así como que solo puedan producirlas los viveros que dispongan de instalaciones en la Comunitat Valenciana, rompiendo el principio de unidad de mercado y de libre establecimiento previsto en la Unión Europea. Bajo el pretexto de la experimentación, este nuevo modelo pretende posicionar al agricultor valenciano frente al resto de agricultores de otras zonas productoras y competidoras.
Hasta entonces -según las citadas asociaciones-, las obtenciones vegetales conseguidas en el IVIA eran cultivadas por cualquier agricultor español, y eran explotadas comercialmente a través de licencias con los viveros de cítricos que aportaran las garantías requeridas. Dicho Instituto ha venido siendo el centro de investigación de referencia en el cultivo de cítricos a nivel nacional, gracias a las dotaciones humanas y técnicas recibidas de los presupuestos del Estado. Para la obtención de dichas variedades este Instituto se nutre adicionalmente de fondos estatales canalizados a través del INIA (Instituto Nacional de Investigación y Tecnología Agraria y Alimentaria).
La denuncia recoge que para limitar el acceso de las variedades solo a los agricultores valencianos, la Consejería de Agricultura de la Generalitat Valenciana va a «justificarlo» argumentando, según dice el pliego de condiciones, “…con el objeto de que esta evaluación sea lo más completa posible, durante el periodo de vigencia del contrato todas las explotaciones que planten esta variedad deberán estar ubicadas en la Comunitat Valenciana”, por lo que durante todo ese periodo, tan sólo los agricultores valencianos podrán disponer de las plantas pudiendo limitar el número de plantas a comercializar a partir de 2014. Obviamente, cuando se proceda entonces a la comercialización en el resto de España, si fuera así (podrían también decir que no se comercializan más plantas a partir de esa fecha) la situación de desventaja de los agricultores del resto del país que entonces pretendan acceder a estas variedades será totalmente evidente.
Esta situación ha sido puesta en conocimiento de la Consejería de Agricultura, Pesca y Alimentación de la Junta de Andalucía, de la Oficina Española de Variedades Vegetales, del INIA y de la Secretaría General de Agricultura del MAGRAMA, a cuya Secretaria General, Dña. Isabel García Tejerían, se la ha informado personalmente del asunto. Todos estos organismos contactados están interviniendo en el tema, y se han mostrado en desacuerdo con la decisión adoptada por la Comunidad Valenciana.